DESCUBRIMIENTO DE CICLOPES

En la antigua mitología griega, los cíclopes eran los miembros de una raza de hombres gigantes con un solo ojo en mitad de la frente. Gozaban de una inteligencia limitada y tenían un carácter brusco y violento, y no dudaban en emplear su gran fuerza para atacar a las personas. Su presencia en diversos escritos y grabados nos desvela que tenían una fuerte influencia dentro de las creencias mitológicas de los antiguos griegos.

Actualmente se entiende perfectamente que casi toda la mitología griega es eso mismo: mitología. Se trata de historias inventadas que hablan de criaturas y dioses que realmente solo existían en la mente de los escritores, pero ¿es posible que existan realmente los cíclopes?

Posiblemente, en su mezcla de ficción y realidad, los griegos inventaron la figura del cíclope en base a un curioso hallazgo. Othenio Abel, paleontólogo de la Universidad de Viena, defiende que posiblemente los griegos encontrasen cráneos fósiles de Elephas falconeri, popularmente conocidos como Mamuts enanos, y confundiesen el mismo con el de un cráneo humano con una sola cavidad ocular (en el caso del cráneo de mamut, la cavidad de la trompa). Investigando por la red, estudiamos diversas fotos de estos cráneos y verificamos que realmente esta teoría podría ser cierta, y que el origen de la creencia en los cíclopes de los griegos se debía a esto.
Ahora bien, investigada la posible causa equívoca de su origen, queremos saber si realmente existen o existieron hombres grandes con un solo ojo en el centro de su cabeza, y la respuesta es SÍ, aunque de una manera distinta a la relatada en las historias griegas.

Los cíclopes existen y se deben a una malformación congénita durante el embarazo, que hace que el bebé nazca con un solo ojo, a menudo a mitad de desarrollo, en el centro de su cara. Todos los casos que se han documentado han terminado en fallecimiento a las pocas horas o días, y sólo se conocen unos 4 o 5. La realidad es que estos "cíclopes", mas que gigantes eran sólo bebés que debido al infortunio nacieron con esa malformación, a menudo acompañada de otras como falta de sistema de respiración (boca y nariz), brazos y pierna deformes, cardiopatías genéticas severas, etcétera. No se ha documentado ni un sólo caso de supervivencia de los bebés cíclopes.